OAKLAND, Calif. (5 de febrero de 2019)—Los californianos afroamericanos y latinos están expuestos a una mayor contaminación de materiales particulados finos (PM2.5) proveniente de automóviles, camiones y autobuses de cerca de 40 por ciento más que los californianos blancos, según un nuevo análisis de Union of Concerned Scientists (UCS).
UCS analizó las emisiones vehiculares de los tubos de escape y el reabastecimiento de combustible y estimó la exposición a la contaminación a nivel de zona censal. El estudio descubrió que los afroamericanos están expuestos a niveles de contaminación del aire provenientes de vehículos 43 por ciento más altos y los latinos 39 por ciento más altos que los californianos blancos, respectivamente.
Algunos PM2.5 se forman durante la combustión de gasolina o diésel en un motor, pero la mayoría de los PM2.5 se forman cuando los contaminantes reaccionan en la atmósfera. Entre todos los contaminantes del aire, PM2.5 tiene el mayor impacto en la salud humana. Las partículas son tan pequeñas (20 veces más pequeñas que el ancho de un cabello humano) que pueden penetrar profundamente en los pulmones y el torrente sanguíneo. El PM2.5 está vinculado a enfermedades cardíacas y pulmonares agudas y crónicas, ataques de asma, aumento de hospitalizaciones, cáncer de pulmón y muerte.
“Los residentes en las comunidades más afectadas han sabido por generaciones que había una cantidad desproporcionada de contaminación del aire en sus vecindarios”, dijo David Reichmuth, ingeniero sénior de UCS y autor del nuevo estudio. “Este modelo nos permite cuantificar la magnitud de la desigualdad en todo el estado. California ha hecho grandes avances en las últimas décadas para reducir la contaminación de los vehículos, pero estos datos muestran que los afroamericanos, latinos y asiáticos en California aún respiran mayores cantidades de contaminación”. En promedio en todo el estado, el estudio encontró que la contaminación del aire es más baja donde el porcentaje de californianos blancos es más alto.
La gran disparidad en la exposición a la contaminación entre los grupos raciales y étnicos fue similar a las disparidades encontradas entre las áreas geográficas y los niveles de ingresos en California. Los residentes del condado de Los Ángeles están expuestos a un 60 por ciento más de contaminación vehicular que el promedio estatal y un 250 por ciento más que los residentes del área de la Bahía de San Francisco. Sin embargo, en partes del área de la Bahía de San Francisco como West Oakland o San José, el aire es igual de sucio al aire promedio de Los Ángeles, según el estudio. Aunque Los Ángeles tenga el más grande promedio del estado, zonas censales de Central Bakersfield tienen la mayor concentración de PM2.5 proveniente de automóviles, camiones y autobuses.
Los hogares de California con los ingresos más bajos (que ganan menos de $20,000 por año) están expuestos a un 25 por ciento más de contaminación de PM2.5 que los hogares de California con mayores ingresos (que ganan más de $200,000 por año). El estudio también encontró que los californianos en hogares sin un vehículo personal están expuestos a un 19 por ciento más de PM2.5 que el promedio estatal porque tienden a vivir en áreas urbanas rodeadas de tráfico.
“Las personas que a propósito o debido a circunstancias financieras no son dueños de un automóvil y no contribuyen directamente a la contaminación del aire proveniente de automóviles y camiones aún viven con más de ese tipo de contaminación. Los líderes locales y los defensores del aire limpio deben notar la ironía”, dijo Reichmuth.
Las emisiones de los vehículos también incluyen el dióxido de carbono, que contribuye al cambio climático.
El análisis de UCS recomienda continuar y ampliar las políticas estatales actuales dirigidas a reducir la contaminación vehicular en comunidades sobrecargadas para disminuir la grave desigualdad entre los grupos raciales y las personas de diversos niveles de ingresos en todo el estado.
“Tenemos la ventaja en este estado de que ya contamos con reglas y políticas innovadoras que nos han convertido en líderes en la electrificación del transporte y la reducción de emisiones”, dijo Reichmuth. “Pero tenemos que hacer más para asegurarnos de que todos los californianos respiren aire puro. Con una crisis de vivienda sin cesar en este estado y el desarrollo más denso cerca de los corredores de alto tráfico que se espera, debemos priorizar los programas de vehículos limpios que beneficien a las comunidades más afectadas por la contaminación del aire”.